El concejal de Medio Ambiente, Antonio Ávila, ha denunciado que en el parque de los arroyos Rivillas y el Calamón, esta noche ''un grupo de bárbaros'' se ha vuelto a dedicar a prenderle fuego a los jardines , y en concreto a una zona importante que son los tubos que llevan el agua para poder regar.
Por este motivo, el ayuntamiento tendrá que colocar una nueva instalación de riego, arrancar las plantas secas y comprobar si hay algún árbol seco para igualmente eliminarlo.
Algo que el concejal ha lamentado porque este tipo de actos no hacen otra función que la de ir en contra del patrimonio de la ciudad, perjudicar el aspecto visual de uno de los parques más importantes y desmotivar a los operarios que trabajan en la zona ya que son hechos continuos, que suceden cada varias semanas o incluso días, desde hace algo más de dos años.
Ávila ha lamentado que no han logrado detener en todo este tiempo a quien esté cometiendo estos actos y ha solicitado la colaboración ciudadana para que aquellos que vean algo anormal den cuenta a la policía para poder detener a estas personas.
''Si acosamos a una misma zona constantemente al final se deteriora'' y aunque le consta que ha habido policías de calle, ''hay muchas veces que las investigaciones no dan sus frutos'', ha asegurado, al tiempo que ha avanzado que se ha realizado un reportaje fotográfico con cada uno de los actos vandálicos ocurridos en la zona como la rotura de aspersores, plantas, papeleras… para que los agentes puedan comenzar una investigación.
VANDALISMO O DETERIORO
En relación a este tema, el grupo municipal del PSOE, criticaba la semana pasada que los desperfectos que había en este parque, correspondían en una mínima parte a los actos de vandalismo pero que fundamentalmente eran una cuestión de ''dejadez'' por el equipo de gobierno.
Al respecto, Ávila ha garantizado que la critica socialista no se ajusta a la realidad y que ha ''indignado'' y ''desmotivado'' a los funcionarios que trabajan diariamente en la zona.
Le pide al portavoz, Ricardo Cabezas, ''que recapacite y se lo piense, porque que en política no vale todo'', y lo que está claro dice es que ''el deterioro no es consecuencia de ninguna dejadez'', sino a que esa zona tiene un ''acoso y derribo tremendo'' desde hace dos años.
